¡Sube el ritmo! Un ritmo vibrante mejora la capacidad cognitiva

El Periódico de la Psicología. Barcelona 24.09.2025 www.elperiodicodelapsicologia.info Tel. +34 675763503
Por la Universidad de Tsukuba

Bailar al ritmo de la música es una actividad humana universal. Pero ahora, investigadores japoneses han descubierto que bailar no solo se siente bien, sino que también mejora la función cerebral.

En un estudio publicado recientemente en Scientific Reports, investigadores de la Universidad de Tsukuba han revelado que la música con groove, conocida como música groove, puede aumentar significativamente las medidas de la función ejecutiva y la actividad cerebral asociada en los participantes que están familiarizados con la música.

La música que evoca la sensación de groove puede generar sensaciones de placer y aumentar los niveles de activación conductual. Se sabe que el ejercicio, que tiene efectos positivos similares, mejora la función ejecutiva. Por lo tanto, esto también podría ser un efecto de escuchar música groove. Sin embargo, ningún estudio ha examinado el efecto de la música groove en la función ejecutiva ni en la actividad cerebral en regiones asociadas con esta función, como la corteza prefrontal dorsolateral izquierda (CPFDL-I), que los investigadores de la Universidad de Tsukuba se propusieron abordar.

«Los ritmos groove provocan sensaciones groove y respuestas afectivas positivas. Sin embargo, se desconoce si influyen en la función ejecutiva», afirma el profesor Hideaki Soya, autor principal del estudio. «Por consiguiente, en el presente estudio, realizamos imágenes cerebrales para evaluar los cambios correspondientes en la función ejecutiva y medimos las respuestas psicológicas individuales a la música groove».

Para ello, los investigadores realizaron espectroscopia funcional de infrarrojo cercano (fNIRS) con una tarea de correspondencia de colores y palabras para examinar la función ejecutiva inhibitoria antes y después de escuchar música. También realizaron una encuesta sobre la experiencia subjetiva de escuchar música groove.

«Los resultados fueron sorprendentes», explica el profesor Soya. «Descubrimos que el ritmo groove mejoraba la función ejecutiva y la actividad en la corteza prefrontal dorsolateral (CPDL-I) solo en los participantes que informaron que la música les provocaba una fuerte sensación de groove y lucidez mental».

De hecho, estas respuestas psicológicas al escuchar el ritmo groove podrían predecir cambios en la función ejecutiva y en la actividad de la l-DLPFC.

«Nuestros hallazgos indican que las diferencias individuales en las respuestas psicológicas a la música groove modulan los efectos correspondientes en la función ejecutiva. Por lo tanto, los efectos del ritmo groove en el rendimiento cognitivo humano pueden verse influenciados por la familiaridad o la capacidad de procesamiento del ritmo», afirma el profesor Soya.

Las estrategias para mejorar la función ejecutiva tienen una amplia gama de posibles aplicaciones, desde la prevención de la demencia en personas mayores hasta la mejora del rendimiento de los empleados. Además, los efectos positivos de la música groove en la función ejecutiva podrían incluir emociones positivas y sincronización rítmica. Esto podría explicar los numerosos beneficios del baile o de cualquier tipo de ejercicio realizado mientras se escucha música. Se necesita más investigación para desarrollar aplicaciones para esta nueva información.

Proporcionado por la Universidad de Tsukuba
info@elperiodicodelapsicologia.info ISSN 2696-0850 medio de comunicación especializado Tel. +34 675763503 Humanistas

Deja un comentario