La velocidad y la inmediatez son la norma, hemos olvidamos el valor y la belleza del cambio gradual. De la pausa. del momento presente. Se habla mucho de «vivir el presente» pero se confunde el concepto con «vivir convulsivamente. Nos hemos rendido a la conveniencia del «todo a un clic», a la magia de obtener lo que deseamos al instante, tu sushi preferido una noche de lluvia, un libro de una tienda de Londres o una nueva cita, todo a un clic.
Sin embargo, ¿nos hemos parado a pensar en el precio de esta velocidad? ¿Qué sucede cuando aplicamos el mismo enfoque al cambio en nuestras vidas? La realidad es que no existen soluciones mágicas y rápidas que nos lleven a un estado de satisfacción duradera. Tomar decisiones impulsivas y buscar cambios instantáneos a menudo resulta en forma de caos y ansiedad.
La paciencia y la disciplina, virtudes vintage
Queremos resultados rápidos, y no estamos dispuestos a esforzarnos. Esta impaciencia se refleja en todos los aspectos de nuestra vida, desde la educación hasta los hábitos cotidianos. Un clic y tenemos acceso a un mundo de información, pero ¿qué hemos perdido en el proceso?
Es hora de repensar nuestra relación con el cambio. ¿Por qué no considerar la idea de un cambio gradual? Cada paso en el camino del cambio debería ser un proceso de aprendizaje. El tiempo y la profundización son esenciales para la integración real del cambio en nuestra vida. Solo cuando estamos preparados podemos dar el siguiente paso con confianza.
En lugar de buscar soluciones instantáneas, podríamos considerar la belleza del cambio incremental. Cada pequeño paso nos lleva a una comprensión más profunda y a una adaptación más efectiva. En lugar de querer una actualización de la última versión, podríamos aprender a valorar el proceso.
Cambio gradual y sostenibilidad
Algunos se plantean ya si es el momento de dar un paso atrás y reflexionar sobre hacia dónde nos dirigimos como sociedad. ¿Estamos perdiendo la capacidad de aprender y crecer gradualmente? Recordemos que el cambio a un clic puede ser -y es- muy tentador, pero el cambio gradual es donde se encuentra la verdadera transformación y la sostenibilidad a largo plazo.
Y la invitación compartida es: La próxima vez que te enfrentes a una decisión que conlleva cambio, pregúntate si podrías optar por el cambio gradual en lugar de buscar soluciones instantáneas. La paciencia puede no estar de moda, pero quizás sea clave para una vida más consciente y equilibrada.
Sandra Gali. Coach. Hipnologa. Escritora. Humanista
sandragali.com